El único contratiempo fue que no funcionase la fuente, ya que le restaba vistosidad.
Contábamos con que la caída del agua al chocar con los nenúfares, produciría una serie sonidos y reflejos multicolores muy llamativos.
Y, a pesar de no haber conseguido ningún premio, sabemos de muy buena tinta que, hemos estado muy cerca de conseguirlo, lo que nos anima a seguir y nos convierte en competidores de riesgo para el resto de participantes en próximas ediciones.